Durante los últimos tiempos en Ecuador se ha satanizado la palabra banquero y ha servido para desprestigiar al candidato Guillermo Lasso Mendoza, que ha trabajado por buena parte de su vida profesional en esa actividad. Si bien reconozco que nunca en la historia de la humanidad la actividad de banquero ha sido la más popular, hay que señalar que en el caso del Ecuador a la maquinaria mediática del gobierno de la Revolución Ciudadana ha contribuido enormemente en crear ese estigma con el objetivo de señalar un enemigo general y abstracto a quien culpar para reunir un frente común de partidarios explotando especialmente el trágico suceso de la crisis bancaria de inicios del año 99 y al mismo tiempo, crear una cortina de humo que tape lo que realmente pasaba en dicho gobierno.
Es importante para no caer en el juego de políticos con malas intenciones y de otros actores sociales, de conocer la historia ya que como dice el dicho popular: Quien no conoce la historia está condenado a repetirla.
En el caso de un presidente Banquero, yo no dejo de recordar la figura de Carlos Julio Arosemena Tola, un hombre quien viajó desde niño a los EEUU a educarse, volviendo ya adulto al Ecuador. Había estudiado medicina pero se dio cuenta que no era lo suyo, meditó que lo que realmente quería hacer era ayudar y servir a los demás y que podía cumplir dicho objetivo, no siendo Doctor, sino un hombre de acción aprovechando sus cualidades organizativas y habilidades con los números visualizando que podía ser un buen administrador.
EN 1905 entró a trabajar sin sueldo para en el Banco del Ecuador que gerenciaba su padre para aprender del oficio. Años después aprovechando las oportunidades, fundó y Gerenció el Banco de Descuento entidad que él supo sortear y resolver muchos problemas a lo largo de su gerencia, cierta vez estando enfermo y convaleciente el Banco fue objeto de un robo y ante eso su buen juicio y buenas decisiones pudo superar ese acontecimiento, cabe recordar también que el Banco de Descuento sobrevivió a la crisis económica y social que desembocó en la revolución Juliana, crisis en la que quebraron muchos bancos Guayaquileños, así como el Banco de Guayaquil sobrevivió a la Crisis bancaria del 98- 99 gracias a la buena gestión de Guillermo Lasso Mendoza.
Carlos Julio Arosemena Tola, paralelo a la gerencia del banco y en concordancia con su vocación ya descrita. ayudó a desarrollar la Liga Ecuatoriana Antituberculosa siendo su vicepresidente, fue Presidente de la Junta de Beneficencia de Guayaquil y Director del Comité de Viabilidad así como creador de la Comisión de Tránsito del Guayas.
Después de la revolución Juliana hubo un gran periodo de inestabilidad política en el Ecuador que duró casi dos décadas hasta 1947. Se sucedieron en la misma, juntas militares, conflictos civiles, dictaduras, muchos cuartelazos, presidentes interinos y presidentes constitucionales que no terminaban su periodo para el cual fueron elegidos, era notorio que el Ecuador necesitaba calma y estabilidad y analizando su trayectoria se eligió a Carlos Julio Arosemena Tola como Presidente de la República.
Con su prudencia tranquilidad, sencillez, austeridad y buen Juicio el Ecuador respiró estabilidad y fue el principio de un gran período que abarca desde 1947 hasta 1961 en que el Ecuador gozó de estabilidad democrática y se convirtió en el mayor exportador de banano en el mundo.
Mediten por tanto su voto y al hacerlo no caigan en el prejuicio que alienta el socialismo de encasillar a una persona de banquero. Pregunto entones: ¿No necesita en este momento el Ecuador un excelente administrador, ya comprobado, para poder hacer frente a los desafíos actuales de este país?